Gastroenteritis por salmonela (bebé/niño pequeño)

La salmonela es un tipo de bacteria que transmiten algunos animales. Estos pueden ser pollos, pavos, vacas, cerdos, lagartos, iguanas, perros y gatos. Las personas pueden contagiarse si comen alimentos que proceden de un animal infectado. Estos incluyen los huevos y las carnes crudos o poco cocidos. También se puede transmitir con alimentos o agua que hayan estado en contacto con las heces de un animal o una persona que estén infectados.

Esta infección ocurre con mayor frecuencia en niños menores de 5 años. Los niños que tienen problemas en el sistema inmunitario corren mayor riesgo de enfermarse de gravedad.

La infección por salmonela puede causar síntomas tales como los siguientes:

  • Náuseas

  • Vómitos

  • Cólicos o dolores abdominales

  • Diarrea, a veces con sangre

  • Fiebre

  • Dolor de cabeza

Los síntomas suelen aparecer en un plazo de 2 días después de haber estado expuesto. Por lo general, desaparecen al cabo de 3 a 7 días.

En ocasiones, la enfermedad se trata con antibióticos. Los síntomas leves desaparecen sin tratamiento con antibióticos. Los casos más graves o las personas de mayor riesgo necesitan antibióticos.

El principal peligro de esta enfermedad es la deshidratación. Esto es la pérdida de demasiada agua y minerales del cuerpo. Cuando esto sucede, se deben recuperar los líquidos del cuerpo. Esto se puede hacer con una solución de rehidratación oral. La solución de rehidratación oral se vende en las farmacias y la mayoría de los supermercados. Evite las bebidas deportivas. No son adecuadas para bebés o niños pequeños.

Cuidados en el hogar

Siga todas las instrucciones que le dé el proveedor de atención médica de su hijo.

Si le da medicamentos a su hijo:

  • No le dé medicamentos de venta libre para la diarrea, a menos que el proveedor de atención médica de su hijo se lo indique. Estos medicamentos pueden hacer que la enfermedad dure más tiempo.

  • Si le recetaron antibióticos, asegúrese de que su hijo los tome todos los días hasta acabarlos. No deje de dárselos, aunque su hijo se sienta mejor. Debe tomar todos los antibióticos para que el tratamiento esté completo.

  • Puede usar paracetamol o ibuprofeno para controlar el dolor y la fiebre. U otro medicamento, según se le indique.

  • No le dé aspirina a un niño menor de 19 años que está enfermo. Esto puede causar daños graves al hígado y al cerebro debido a una afección que puede poner en riesgo la vida, llamada síndrome de Reye.

Cómo prevenir la propagación de la enfermedad:

  • Recuerde que el lavado de manos con agua y jabón y el uso de desinfectante a base de alcohol es la mejor manera de evitar que se propague la infección.

  • Lávese las manos antes y después de ocuparse de su hijo enfermo.

  • Limpie el inodoro o el área donde le cambia los pañales después de cada uso. Deseche los pañales sucios en un recipiente sellado.

  • No envíe a su hijo a la guardería hasta que su proveedor de atención médica diga que ya puede hacerlo.

  • Enséñele a lavarse las manos después de usar el baño y antes de las comidas. Esto es muy importante si su hijo va a la guardería.

  • Asegúrese de que su hijo no esté en contacto con las heces de reptiles (tortugas, lagartos e iguanas), aves, perros y gatos. Lave sus manos con jabón después de tocar reptiles, aves, pollitos y después de manipular las heces de las mascotas.

  • Lávese las manos antes y después de preparar la comida. Tenga en cuenta que las personas con diarrea o vómitos no deberían preparar comida para los demás.

  • Lávese las manos después de usar tablas de cortar, encimeras y cuchillos que hayan estado en contacto con alimentos crudos.

  • Lave las frutas y verduras antes de pelarlas.

  • Mantenga las carnes crudas alejadas de los alimentos cocidos y listos para comer.

  • Lave todos los utensilios de cocina (como las tablas de cortar) después de haberlos utilizado para los alimentos crudos.

  • Use un termómetro para alimentos cuando cocine. Cocine el pollo a 165 °F (74 °C) como mínimo. Cocine la carne molida (de res o vacuna, de ternera, cerdo, cordero) a 160 °F (71 °C) como mínimo. Cocine la carne fresca de res o vacuna, de ternera, cerdo, cordero a 145 °F (63 °C) como mínimo.

  • No le sirva a su hijo huevos crudos o poco cocidos (escalfados o huevos fritos con la yema algo cruda), ni carne de res o de ave cruda o poco cocida, como tampoco leche o jugos sin pasteurizar.

  • No ingiera alimentos preparados con leche no pasteurizada.

Administración de líquidos y comidas

El principal objetivo del tratamiento para los vómitos o la diarrea es evitar la deshidratación. Para eso, debe administrar pequeñas cantidades de líquido con frecuencia.

Si amamanta a su bebé, siga haciéndolo. La leche materna, por lo general, contiene todos los líquidos y los electrolitos que el bebé necesita. 

Si amamanta a su bebé:

  • Para la diarrea: amamante a su hijo con más frecuencia de la habitual. Si tiene mucha diarrea, dele una solución de rehidratación oral entre comidas. A medida que la diarrea se alivie, deje de darle la solución de rehidratación oral y vuelva a amamantarlo en los horarios habituales.

  • Para los vómitos: después de 2 horas sin vómitos, vuelva a amamantarlo. Amamante a su bebé solo la mitad del tiempo habitual con cada seno, cada 1 o 2 horas. Si su hijo vuelve a vomitar, amamántelo únicamente 5 minutos en solo uno de los senos, cada 30 o 60 minutos. Amamántelo una vez con cada seno. Aunque el niño vomite, igual absorberá algo de la leche. Cuando haya dejado de vomitar, vuelva a los tiempos habituales de amamantamiento.

Si su bebé toma el biberón:

  • Dele pequeñas cantidades de líquido con frecuencia, particularmente si vomita. De 30 a 60 ml (1 o 2 onzas) cada 30 minutos puede aliviar los síntomas. Comience con 1 cucharadita (5 ml) cada 5 minutos e incremente la cantidad de manera gradual según la tolerancia del niño.

  • Para la diarrea: dele leche o fórmula reforzada. Si tiene mucha diarrea, dele una solución de rehidratación oral entre las comidas. Si le da leche y la diarrea no se alivia, deje de darle leche. En algunos casos, la leche puede empeorar la diarrea. Pruebe darle fórmula de soya o arroz. No le dé jugo de manzana, gaseosa ni ninguna otra bebida endulzada. Las bebidas con azúcar pueden empeorar la diarrea. Si su hijo comienza a sentirse peor con estos alimentos, vuelva a darle líquidos transparentes.

  • Para los vómitos: después de 2 horas sin vómitos, intente darle leche o la fórmula habitual. Si, en algún momento, su hijo comienza a vomitar otra vez, vuelva a darle pequeñas cantidades de líquidos transparentes. Comience dándole pequeñas cantidades y aumente la cantidad según lo que el niño tolere.

  • Si su hijo se siente bien después de 24 horas, vuelva a darle la dieta habitual en los horarios habituales.

Si su hijo come alimentos sólidos:

  • Tenga en cuenta que, en este momento, los líquidos son más importantes que los alimentos. Dele pequeñas cantidades de líquidos con frecuencia, en especial si su hijo tiene cólicos estomacales o vómitos.

  • Para la diarrea: si le da leche a su hijo y la diarrea no se alivia, deje de darle leche. La mayoría de los niños pueden tolerar la leche, aunque tengan diarrea. Sin embargo, en algunos casos la leche puede empeorar la diarrea. Si eso sucede, use una solución de rehidratación oral en lugar de la leche. Si tiene mucha diarrea, dele una solución de rehidratación oral entre las comidas.

  • Para los vómitos: comience dándole una solución de rehidratación oral a temperatura ambiente. Dele 1 cucharadita (5 ml) cada 5 minutos. Aunque su hijo vomite, siga dándole la solución. Absorberá gran parte del líquido, a pesar de los vómitos. Después de 2 horas sin vómitos, comience a darle pequeñas cantidades de leche o fórmula y otros líquidos. Aumente la cantidad según lo que el niño tolere. No le dé agua sola, leche, fórmula ni otros líquidos hasta tanto haya dejado de vomitar. A medida que vomite menos, intente darle más cantidad de solución de rehidratación oral. Hágalo de manera más espaciada cada vez. Siga haciendo esto hasta que el niño comience a orinar y ya no sienta tanta sed (no demuestre tanto interés por beber). Después de 4 horas sin vómitos, comience a darle alimentos sólidos. Después de 24 horas sin vómitos, vuelva a la dieta normal.

  • Puede volver a darle la dieta normal a su hijo a medida que vaya sintiéndose mejor. No fuerce a su hijo a que coma, especialmente si tiene dolor de estómago o cólicos estomacales. No alimente a su hijo con gran cantidad de comida a la vez, incluso si tiene hambre. Esto puede hacer que se sienta peor. Podrá darle más comida a medida que la tolere mejor. Si el bebé tiene más de 4 meses, puede darle cereal, puré de papas, compota de manzana, banana pisada o papilla de zanahoria durante este momento. Si su hijo tiene 1 año o más, puede darle galletas, pan blanco, arroz y otros alimentos con almidón complejo, carnes magras, yogur, frutas y verduras. Los alimentos de bajo contenido graso son más fáciles de digerir que los alimentos de alto contenido graso.

  • Si tiene síntomas otra vez, vuelva a darle una dieta simple o líquidos transparentes.

Atención de seguimiento

Programe una visita de seguimiento con el proveedor de atención médica de su hijo, o según lo que se le haya indicado. Si le tomaron una muestra de heces o le hicieron un cultivo, llame al proveedor de atención médica para conocer los resultados, según lo que se le haya indicado.

Cuándo llamar al  911

Llame al  911 si tiene algo de lo siguiente:

  • Dificultad para respirar

  • Confusión

  • Somnolencia extrema o dificultad para caminar

  • Pérdida del conocimiento

  • Frecuencia cardíaca acelerada

  • Rigidez en el cuello

  • Convulsiones

Cuándo debe buscar atención médica

Llame al proveedor de atención médica de su hijo de inmediato ante cualquiera de las siguientes situaciones:

  • Dolor abdominal que empeora

  • Dolor constante en el lado inferior derecho del abdomen

  • Vómitos repetidos después de las 2 primeras horas de beber solo líquidos

  • Vómitos ocasionales durante más de 24 horas

  • Más de 8 evacuaciones de diarrea en 8 horas

  • Diarrea intensa durante más de 24 horas

  • Incapacidad para comer o beber

  • Sangre en el vómito o las heces

  • Falta de apetito o sed

  • Orina oscura o falta de orina durante 6 horas, ausencia de lágrimas al llorar, ojos hundidos o boca seca

  • Irritabilidad o llanto que no se logra calmar

  • Somnolencia anormal

  • Sarpullido cutáneo nuevo

  • Diarrea con duración de más de 1 semana

  • Fiebre (consulte "La fiebre y los niños", a continuación)

La fiebre y los niños

Use un termómetro digital para tomar la temperatura de su hijo. No use un termómetro de mercurio. Hay termómetros digitales de distintos tipos y para usos diferentes. Entre ellos, se encuentran los siguientes:

  • Rectal. En los niños de menos de 3 años, la temperatura rectal es la más precisa.

  • En la frente (lóbulo temporal). Sirve para niños de 3 meses en adelante. Si un niño de menos de 3 meses tiene signos de estar enfermo, este tipo de termómetro se puede usar para una primera medición. Es posible que el proveedor quiera confirmar la fiebre tomando la temperatura rectal.

  • En el oído (timpánica). La temperatura en el oído es precisa a partir de los 6 meses de edad, no antes.

  • En la axila (axilar). Este es el método menos confiable, pero se puede usar para una primera medición a fin de revisar a un niño de cualquier edad que tiene signos de estar enfermo. Es posible que el proveedor quiera confirmar la fiebre tomando la temperatura rectal.

  • En la boca (oral). No use el termómetro en la boca de su hijo hasta que tenga al menos 4 años.

Use el termómetro rectal con cuidado. Siga las instrucciones del fabricante del producto para usarlo adecuadamente. Colóquelo con cuidado. Etiquételo y asegúrese de no usarlo en la boca. Podría transmitir gérmenes de las heces. Si no se siente cómodo usando un termómetro rectal, pregunte al proveedor de atención médica qué otro tipo puede usar. Cuando hable con el proveedor de atención médica sobre la fiebre de su hijo, infórmele qué tipo de termómetro usó.

A continuación, se indica cuándo llamar al proveedor de atención médica si su hijo tiene fiebre. Es posible que el proveedor de atención médica de su hijo le dé valores diferentes. Siga sus instrucciones.

Cuándo debe llamar al proveedor de atención médica si su hijo tiene fiebre

En el caso de un bebé menor de 3 meses:

  • Primero, pregunte al proveedor de atención médica de su hijo cómo debe tomarle la temperatura.

  • En el recto o en la frente: 100.4 °F (38 °C) o superior

  • En la axila: 99 °F (37.2 °C) o superior

  • Fiebre de ___________ según le indique el proveedor

En el caso de un niño de 3 a 36 meses (3 años):

  • En el recto o en la frente: 102 °F (38.9 °C) o superior

  • En el oído (solo para uso a partir de los 6 meses): 102 °F (38.9 °C) o superior

  • Fiebre de ___________ según le indique el proveedor

En estos casos:

  • Temperatura en la axila de 103 °F (39.4 °C) o superior en un niño de cualquier edad

  • Temperatura de 104 °F (40 °C) o superior en un niño de cualquier edad

  • Fiebre de ___________ según le indique el proveedor

Online Medical Reviewer: L Renee Watson MSN RN
Online Medical Reviewer: Liora C Adler MD
Online Medical Reviewer: Rita Sather RN
Date Last Reviewed: 11/1/2022
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